Feliz. Felipe, en su casa de Tres
Algarrobos, jugando con su nueva mano.
Felipe Miranda tiene 11 años. Vive en Tres Algarrobos,
un pueblo bonaerense de 3.500 habitantes, y a causa de una enfermedad genética
que se llama focomelia, nació sin su mano izquierda. Desde bebé y hasta los
tres años recibió estimulación temprana. Con sus limitaciones, comenzó a jugar
a la pelota, a andar en bicicleta y en kayak, y también a pescar. Pero siempre
pidió una mano, su mano. Hace una semana, por encomienda, una mano ortopédica
impresa en 3D llegó a su casa. Y hace una semana que Felipe está fascinado.
“Cuando llegó la caja, me puse muy
contento. Hacía tres meses que la esperaba. Es liviana y muy práctica. Puedo
agarrar una pelotita de tenis y hasta el mate dulce que tomo con mi mamá. Me
siento más seguro, me cambió la vida”, contó el chico ayer con alegría.
Un emprendedor de 33 años y un
estudiante de ingeniería electrónica de 18, diseñaron y desarrollaron su mano
en una impresora 3D. Rodrigo Pérez Weiss abrió en Palermo “3D LAB
fab&café”, un bar y espacio de trabajo cooperativo que ofrece máquinas para
imprimir en 3D por horas. “En una exposición vi por primera vez una impresora
3D, quedé maravillado y me puse a trabajar en esto con aplicación en la
medicina. Estamos desarrollando piezas ortopédicas para ayudar a la gente que
las necesita”, contó Pérez Weiss, junto a Gino Tubaro, estudiante de ingeniería
electrónica.
Ivana Giménez, la mamá de Felipe,
también está fascinada. “Felipe siempre nos pidió una mano. Buscamos en varios
lugares, pero eran imposibles para nuestro bolsillo –una ortopédica cuesta 40
mil dólares–. Un día un tío que vive en Uruguay me mandó por Facebook la
noticia de un estadounidense que le había impreso una mano a su hijo, con tres
links para mirar. Empecé de atrás para adelante y entré al de 3D LAB. Mandé un
mail pidiendo comprar una impresora porque mi marido estaba decidido a aprender
y hacerla él. Pero nos ofrecieron hacerla ellos gratis. No tuvimos que viajar a
Buenos Aires con Felipe. Me pidieron fotos de su brazo, medidas y una impresión
de su mano derecha. Eso fue en enero. Hace una semana llegó la mano. Queremos
viajar para conocer a los chicos personalmente. Ellos me ayudaron a poder
cumplir el sueño de Felipe”.
Según
los emprendedores de Darwin Research es posible fabricar una prótesis cada 48 a
72hs. Un punto a tener en cuenta es que las prótesis en muchos casos deben
adaptarse al cuerpo del usuario.
En la
fabricación de la mano de Felipe ha participado el estudio de diseño D tres. El prototipo inicial está basado en un diseño bajo licencia
abierta cuyo planos están alojados en el sitio Thingverse.
Luego de descargarlo se efectuaron tareas de modificación y algunas mejoras. El
modelo se conoce como Cyborg Beast fue desarrollado por el grupo e-NABLE y es una modificación de
Robohand.
Fuentes: INFOBAE/ TN
Imagen: INFOBAE
Cliquea el enlace y entérate como lo hicieron posible
Vocabulario
Impresora
3D es
una máquina capaz de realizar impresiones de diseños en 3D, creando piezas volumétricas a partir de un
diseño hecho por ordenador. Surgen con la idea de convertir archivos de 2D en
prototipos reales o 3D.. En la actualidad se está extendiendo su uso en la
fabricación de prótesis
médicas, ya que la impresión 3D permite adaptar cada pieza fabricada a las
características exactas de cada paciente
Focomelia:
Es una enfermedad que consiste en la ausencia de miembros óseos y
musculares.
Piezas ortopédicas: los implantes o piezas ortopédicas son
utilizados por la medicina para reemplazar las articulaciones dañadas, las que
causan problemas o ausentes como en el
caso de Felipe.
Robohand: lanzado oficialmente en enero de 2012, Robohand es una empresa que crea prótesis mecánicas accesibles a través del uso de las impresoras 3D.
Robohand: lanzado oficialmente en enero de 2012, Robohand es una empresa que crea prótesis mecánicas accesibles a través del uso de las impresoras 3D.